Cake de chocolate con arándanos

Hoy en entre obleas y a lo loco os traigo una receta dulce impresionante, un bizcocho súper tierno y esponjoso. Pasado el calor ya va apeteciendo hornear pastelitos, por fin llegó el otoño y con él la nueva temporada de pasteles y bizcochos… Mi primer bizcocho de la temporada ha triunfado…

La receta base del bizcocho es muy fácil y con pocos ingredientes, me he basado en la receta del blog Mi cocina de temporada, aquí podéis ver la receta original que es un pastel de chocolate y fresa con una pinta increíble.

El secreto para que el bizcocho salga tierno (tan tierno que se desmorona) y esponjoso es batir muy bien las yemas y las claras a punto de nieve, aquí entra en juego las varillas eléctricas, si no las tenéis os recomiendo que os hagáis con unas, la inversión no es muy grande y vuestras muñecas y brazos lo agradecerán.

He utilizado chocolate puro para postres que le ha aportado un intenso sabor y para crear contraste y acentuar los sabores los arándanos desecados son la guinda del pastel…

En cuanto al molde, en un principio quería usar uno rectangular que compré recientemente, cuando fui a cogerlo toda ilusionada porque iba a estrenar mi molde nuevo se había oxidado por las esquinas (lo barato sale caro, siempre) después de lavarlo y haberlo guardado. Así que mi gozo en un pozo, se fue a la basura y no tuve más remedio que utilizar mi molde redondo desmontable de siempre…

A continuación os detallo la receta.

Ingredientes:

• 100 gr mantequilla
• 120 gr harina
• 150 gr azúcar moreno
• 150 gr chocolate postres
• 4 huevos L
• 1 sobre levadura química
• 1 puñado arándanos secos
• 2 cucharadas leche
• 1 cucharadita zumo limón
• 1 pizca sal

Preparación:

Fundimos el chocolate y la mantequilla al baño María. Dejamos templar.

Preparamos el molde donde se cocerá el pastel, en mi caso es desmontable, yo suelo ponerle un papel vegetal en el fondo y después engraso con mantequilla toda la superficie.

Separamos las claras de las yemas.

Añadimos a las claras el zumo de limón y montamos a punto de nieve. Reservamos.

Batimos las yemas con el azúcar hasta formar una cremita.

Añadimos el chocolate fundido y seguimos batiendo para integrar.

Si se os queda una mezcla muy seca como ha sido mi caso podéis añadirle un chorrito de leche, seguidamente mezclamos para integrar.

Mezclamos la harina, levadura y la pizca de sal, tamizamos sobre la mezcla de chocolate y huevos poco a poco e integramos con una lengua pastelera o cualquier utensilio que tengáis para estas ocasiones.

Por último añadimos las claras a punto de nieve en dos o tres veces y vamos integrando con movimientos envolventes, con delicadeza y mimo.

Una vez todos los ingredientes integrados agregamos los arándanos reservando unos cuantos para la superficie del bizcocho. Integramos ligeramente con la masa.

Pasamos la masa al molde y colocamos los arándanos en la superficie como os he comentado anteriormente.

Introducimos a media altura en el horno precalentado a 180º con calor arriba y abajo, cocemos durante 40 minutos aproximadamente, recuerda que cada horno es un mundo, transcurrido el tiempo puedes hacer la prueba del palillo.

Una vez desmoldado podemos espolvorearlo con azúcar glass.

Otra sugerencia de presentación es servirlo con helado de vainilla y chocolate caliente… se me hace la boca agua solo de pensarlo…

El resultado ha sido exquisito, una textura perfecta y un sabor sin igual…

Espero que os animéis con la receta porque es muy fácil, merece la pena, sorprenderéis a los vuestros y disfrutareis de un delicioso bizcocho casero.

¡Nos leemos en la próxima entrada!