Carne de cerdo en salsa reducida

Hoy os traigo una receta muy apetecible no apta para dietas. Sé que en mi blog no abundan las recetas calóricas, más que calóricas, diría que no suelo consumir carnes grasas, soy fan de la dieta equilibrada a base de frutas, verduras, cereales y en menos proporción de carnes blancas y pescados, pero de vez en cuando a nadie le amarga un dulce.

La receta de hoy es de esas recetas que se hacen ocasionalmente y se disfrutan el doble ya que la panceta de cerdo es una carne que en nuestro caso no comemos de forma  habitual.

De nuevo me he basado en una receta que he visto en un canal de youtube, Ruthi, una mexicana que vive en Japón. En uno de sus videoblogs cuenta cómo prepara una deliciosa carne de cerdo en salsa, es muy fácil, con pocos ingredientes y poquísima elaboración. No se utiliza aceite, por lo que reducimos las calorías aunque estemos consumiendo una carne grasa.

En este caso he adaptado los ingredientes a lo disponible en casa, en la receta original se utilizan condimentos japoneses a los que no he tenido acceso.

A continuación os detallo la receta.

Ingredientes (2 personas):

• 500 gr panceta fresca cerdo
• 2 cucharadas vino blanco
• 2 cucharadas azúcar
• 5 cucharadas salsa soja
• 1 pizca de sal y pimienta
• 1 cebolla dulce

Preparación:

Troceamos la panceta y pasamos a una olla.

Cortamos la cebolla en juliana gruesa y añadimos, también la salsa de soja, vino blanco, azúcar y espolvoreamos con una pizca de sal y pimienta negra molida.

Cubrimos con agua y un poco más, como si hiciéramos sopa de pancenta (jaja), tapamos sin presión y cocinamos a fuego medio-bajo durante una hora y cuarto aproximadamente. Si cuando comience a hervir aparece espuma en la superficie, la retiramos. Removemos de vez en cuando.

A media cocción este es el aspecto.

Cuando el agua haya reducido por completo y nos quede una salsa como la que observáis en la imagen, lo tendremos listo. Así de fácil.

Servimos como tapa, entrante o con unas verduritas o ensalada tendréis un plato completo muy sabroso con el que chuparse los dedos.

Es una forma de cocinar diferente pero no por ello menos rico. Tened cuidado con la sal, la salsa de soja ya tiene una cantidad considerable y además, cuando las salsas se reducen se acentúan los sabores.

Espero que os haya gustado y pongáis en práctica la receta, podéis utilizar la carne de vuestra preferencia pero os aconsejo piezas de carne grasas, costillas, secreto, morro, etc., recordando siempre el consumo ocasional y moderando las raciones.

¡Nos leemos en la próxima entrada!